la entrega y dulzura latieron sin censura.
Los años pasaron y huellas dejaron, la alegría de ser padres
nos hizo crecer y creer,dejando atrás el pasado.
levantándonos una y otra vez con los ojos cerrados y los sueños en las manos.
Hoy en el 2011 buscamos con ternura una hermosa criatura
esperando el cielo nos baje un angel, y nos demuestre una vez mas
que los milagros existen y son para invocarlos , amarlos y vivirlos.